Buenos días!
Hoy os traigo una receta deliciosa: galletas de espelta, arándanos y almendras!
Desde hará ya unos dos años que soy vegetariana y intento ser lo más respetuosa posible con los animales y sus productos. Además también intento hacer comidas lo más saludables posibles (aunque a veces me doy algún capricho!). Así pues, casi todo lo que hago en la cocina son recetas vegetarianas o veganas. Esto quiere decir que son aptas para todo el mundo!
Por cierto, la receta la he adaptado de esta web.
Bien, vamos allá!
Ingredientes:
- 125 ml de aceite de oliva (podéis usar aceite de girasol para que el sabor sea más neutro)
- 80 ml de sirope de agave
- 80 ml de leche de avena (o de cualquier otro tipo)
- 250 g de harina de espelta
- 45 g de copos de avena sin tostar
- 50 g de almendra fileteada
- 60 g de arándanos secos
Pasos:
- Precalentar el horno a 180º.
- Mezclar con las varillas, en un bol, los ingredientes líquidos, incluido el sirope de agave.
- En otro bol incorporar todos los ingredientes secos y mezclarlos.
- Verter la mezcla líquida a los ingredientes secos y remover hasta que quede una masa blanda.
- Poner papel de horno en la bandeja y comenzar a hacer montoncitos del mismo tamaño. Debemos pensar que su volumen va aumentar, así que debemos dejar espacio suficiente entre bolita y bolita.
- Cocer en el horno durante unos 20 minutos o hasta que queden doradas. Cuidado no os paséis! Debéis sacar las galletas del horno cuando estén doraditas y empiecen a estar un poco duras. No esperéis a que queden bien duras porque cuando se enfríen van a parecer rocas!
- Sacarlas del horno y dejarlas enfriar en una rejita (para que no les quede la base "sudada").
- No os las comáis todas vosotros solos, compartirlas.
Espero que os hayan gustado y que las probéis en casa! Están riquííííísimas!
Ah! La tazita que acompaña las galletas es un mini-batido de arándanos y leche de avena.